Vienen de las retinas, de ahí sus axones forman el nervio. Se cruzan en el quiasma óptico, cuanto más lateral, más cruzamiento y pasamos al tracto óptico. Este va al tálamo, al metatalamo, al cuerpo geniculado lateral. De aquí sale a la corteza occipital, donde se hace consciente.
Si algo presiona mi corteza occipital, me quedo ciego. La respuesta de amenaza, su aferencia es la vision, la eferencia es el n. VII (mímico).